Un diario envuelto en la polémica por hacer apología del terrorismo y un autor acusado de plagio se unen para criminalizar a los “sionistas”, los “judíos” e “Israel”
Acosados por 150 misiles en una semana, los habitantes de Sderot viven en el terror de la próxima explosión. Hamas se vanagloria. La prensa internacional calla.
En esta crónica la víctima se convierte en verdugo y se priva a los lectores de una información completa, algo nada digno del que pretende ser “El periódico global en español”
El diario El País, que parecía haber apostado en los últimos tiempos por un periodismo más informativo y menos parcial, da señales haber vuelto a cambiar de rumbo