Casi no importa el asunto que tenga a Israel como protagonista, el medio parece publicar prácticamente el mismo artículo: un poco de ideología, otro de distorsión y altas dosis de omisión, todo reducido a una salsa “informativa” aguachenta, escasa y parcial
La benevolente hipótesis de considerar que el desconocimiento es un elemento central en la crónica del medio español es incapaz de sostenerse ante la perseverancia en la abierta adhesión al léxico del grupo terrorista Hamás
Y la mayoría de medios en español, voluntaria o involuntariamente, mediante la práctica de la omisión (de la sistemática incitación palestina al odio y la violencia dirigidasa los niños; de su utilización en el conflicto), entre otras, le hacen un favor a esos líderes
Esta pasada semana y fin de semana, los medios en español no han dado abasto acallando cuestiones relacionadas con los palestinos. Aunque, lo que ya parece una “operación silencio”, no necesita esfuerzo alguno
Ya no es un proceso en el que la voz del periodista concluye al final de la crónica; ahora se prolonga indefinidamente. Y, además, ya no hay sólo lectores, espectadores, sino “seguidores”.
Lo hacía mezclando elementos, omitiendo, descontextualizando, con falta de rigor y haciendo un evidente esfuerzo por responsabilizar a Israel de todos los males
Ante la muerte del palestino Nizar Banat mientras se encontraba bajo custodia de las fuerzas de seguridad de la Autoridad Palestina, la agencia de noticias española estaba más cerca de realizar una gestión de crisis mediática que de dedicarse a la información