“Israel despliega policías en barrios palestinos y escala la tensión en Jerusalén”
“En medio de un clima de creciente tensión, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ordenó reforzar la presencia policial en los barrios palestinos de Jerusalén por considerar que la ciudad ‘está bajo ataque terrorista’, un día después que un hombre atropellara a un grupo de personas y matara a una beba de tres meses estadounidense”.
El título sugería que el despliegue de policías es el que produce la escalada de tensión. Algo completamente erróneo.
El destacado, en tanto,omitía información relevante, dando la impresión de que la agencia de noticias pretendía erradicar la nacionalidad delas víctimas delataquey la del perpetrador, con el fin de no identificar a los israelíescomo víctimas.
El hombre que embistió intencionalmente (no se trata de un “presunto atacante”, como afirma más adelante en su crónica Télam) con su coche a un grupo de personas (su objetivo eran los israelíes, los judíos) era palestino.
Así, en un texto sesgado y que parecía pretender justificar el atentado terrorista, la agencia afirmaba que:
“Silwan, como el resto de los llamados barrios árabes que están pegados a la disputada Ciudad Vieja de Jerusalén, vive una sistemática tensión entre sus habitantes palestinos y los colonos judíos que compran, toman por la fuerza y ocupan ilegalmente casas y edificios allí, bajo el amparo del Estado israelí.
Sólo la semana pasada, 35 colonos judíos israelíes se instalaron en el barrio, según denunciaron organizaciones locales, citadas por Ma’an.
Pero la tensión entre palestinos y colonos judíos israelíes no se limita sólo a Jerusalén este. Esta semana un colono atropelló con su auto y mató a una niña palestina de cinco años en las afueras de Ramallah, en Cisjordania”.
¿Quién dice que “los colonos judíos que compran, toman por la fuerza y ocupan ilegalmente casas y edificios allí, bajo el amparo del Estado israelí”?
La semana pasada un grupo dejudíos se mudaron a dicho barrio, a un inmueble comprado legalmente. Pero la agencia parecía quererdarle al hechola apariencia de unsupuesto abuso.
¿Es ilegal un judío compre una vivienda en la parte Este de la ciudad? ¿Según qué regla o ley?
Según la interpretación de Télam, sí: “la parte oriental de Jerusalén, uno de los tres territorios -junto con Cisjordania y la Franja de Gaza- que son considerados como territorios palestinos ocupados por la ONU y la mayoría de los países del mundo, entre ellos Argentina”.
Según Abbas también: ha promulgado la “cadena perpetua con trabajos forzados” para todo aquél que venda terrenos, departamentos o casas a ciudadanos, empresas u organizaciones israelíes.
¿Y la realidad?
No se reconoce la anexión de la parte oriental de Jerusalén por parte de Israel (lo que no otorga derechos a la parte palestina), pero en ningún documento internacional dicha zona es reconocida como “territorio palestino”.
Pero no importa, Télam – no limitándose al terreno de lo estrictamente informativo – se arroga la “autoridad” para otorgar soberanías y legitimidades.
Por otra parte, el texto de la agencia de noticias indicaba que “la tensión entre palestinos y colonos judíos israelíes no se limita sólo a Jerusalén este. Esta semana un colono atropelló con su auto y mató a una niña palestina de cinco años en las afueras de Ramallah, en Cisjordania”.
Télam, así, pretendía equiparar un accidente con un atentado en el que se utilizó un coche como medio (como arma, en definitiva) – recuérdese que en el destacado también hablaba del “atropello” en Jerusalén. La niña palestina, Einas Khalil, fue atropellada la pasada semana.La policía investigó lo sucedido e interrogó al culpable, que explicó que no se detuvo tras el atropello porque temió ser linchado por la multitud que había acudido al lugar de los hechos. Continuó hasta Ofra, la primera población judía, y llamó a la policía para entregarse y contar lo sucedido. La investigación determinó que se trató de un accidente.
Las diferencias son claras. Pero Télam las borronea para que parezca un ida y vuelta de agresiones; para que las acciones del Ejército o Policía israelí queden igualadas moralmente con las de Hamas o de otros grupos terroristas.
Además, en su recuento de sucesos tensos, olvida mencionar casos de violencia palestina, como por ejemplo:
“El 2 de octubre de 2014 los soldados de la Guardia Fronteriza detuvieron en el cruce Tapuah a dos palestinos de Nablus, de unos veinte años de edad, que despertaron sospechas. En la búsqueda realizada entre sus herramientas se encontraron en poder de ellos, tres artefactos explosivos improvisados, un revólver también improvisado y varios cuchillos. Los palestinos fueron detenidos para ser investigados (Ynet, 2 de octubre de 2014).
El 2 de octubre de 2014 se arrojaron piedras en dirección de un vehículo en el barrio de A – Tur de Jerusalén. Como resultado de esas piedras, resultaron con heridas leves dos chicas, que viajaban en el coche que resultó con daños (Ynet, 2 de octubre de 2014).
El 1 de octubre de 2014 se arrojaron piedras hacia un jardín de infantes judío en Jerusalén Este (Ynet, 1 de octubre de 2014)”. (Centro Meir Amit de Información sobre Inteligencia y Terrorismo)
La agencia, también apuntaba que:
“El líder israelí, que ayer había acusado al movimiento islamista palestino Hamas, hoy no dudó en apuntar directamente a máximo líder del gobierno palestino, Mahmud Abbas.
‘Este ataque es apoyado por el presidente de la Autoridad Palestina’, denunció.
Abbas no le respondió, pero sí lo hizo el jefe de su equipo de negociadores, Saeb Erakat.”
Mas, al parecer, olvidó mencionar – tal como publicó la organización Palestinian Media Watch – que el asesor de Abbas definió al asesino de la bebé como un “mártir heroico” en su página oficial de Facebook.
De hecho, la organización Fatah, liderada por Abbas, publicó lo siguiente en su página oficial de Facebook: “El Movimiento de Liberación Nacional Palestino (Fatah) – rama de Silwan – acompaña en su boda [el “martirio” es visto como una celebración] al heroico mártir… que llevó a cabo la operación de Jerusalén, en la cual colonos de la ciudad ocupada de Jerusalén fueron atropellados”.
¿No es algo relevante; digno de mención? ¿Llamar “mártir heroico” al perpetrador del atentado es un hecho menor?
Pero no sólo eso. El periodista Khaled Abu Toameh comentaba que para entender qué conduce a un joven palestino a llevar a cabo un ataque mortal como el Jerusalén, uno necesita prestar atención a las declaraciones de los líderes de la Autoridad Palestina de las recientes semanas. Y señalaba que durante los 50 días de la operación Margen Protector, los altos funcionarios de la Autoridad Palestina en Cisjordania hicieron de la incitación contra Israel una práctica diaria. Una vez concluida la guerra, indicaba Toameh, Abbas y la Autoridad Palestina cambiaron su foco a los últimos acontecimientos ocurridos en Jerusalén. Así, unos días antes del ataque terrorista en Jerusalén, Abbas denunció enérgicamente los judíos que visitan el Monte del Templo y los tildó de “rebaño de ganado”.
¿Y el lector de Télam? Prudentemente desinformado: Israel “agrede”, “abusa”, “ocupa”, “mata”; y, ante esto, cada tanto ocurre la “desesperación”, la “impotencia” que llevan a hechos “aislados”, “individuales”, que “nada tienen que ver” ni con Hamas ni el liderazgo palestino (nada que implique una responsabilidad de la Autoridad Palestina, de ninguna organización palestina).