Dado el indudable éxito que en la prensa de habla hispana obtienen los artículos que criminalizan al estado de Israel, ReVista de Medio Oriente ofrece a sus lectores la posibilidad de sumarse al carro de la deslegitimación a través de 10 sencillas pautas.
1- MANIQUEÍSMO (ELIJA SU BANDO)
Antes de empezar, usted debe elegir un bueno y un malo para su historia. En este caso, los palestinos deben ser los buenos y las víctimas indefensas de unos malos verdugos israelíes. Partir de esta base maniquea le permitirá plantear la realidad de un modo partidista y desprovisto de matices. Recuerde que no se trata de mostrar qué sucede, sino de demostrar que usted tiene razón. Así, su crónica no se limitará a ser informativa sino que irradiará denuncia y compromiso. Es el primer paso para convertirse en un buen periodista-activista.
Siempre será más fácil para el lector identificarse con una persona que con una entidad. Así es conveniente que personalice a los palestinos, y que, por lo contrario, diluya la personalidad de los israelíes. Las víctimas palestinas tienen que tener nombre, las israelíes deben ser colonos o soldados.
3- EMPLEE EL LÉXICO DE LOS PALESTINOS
No pierda el tiempo en buscar términos objetivos. No en vano usted ha elegido un bando. Insista en su postura empleando un léxico ideológico. Por ejemplo, no importa que no exista una sólo texto legal que decrete que la ocupación sea ilegal, usted afírmelo.
No olvide hacer referencia al Muro de Separación. No se preocupe si aproximadamente el 95% es una valla, ni tampoco gaste tiempo explicando que se construyó para defender a los israelíes, tras una ola de atentados terroristas.
Este punto complementa al anterior. Recuerde que algo de lirismo le otorgará la satisfacción de haber escrito una buena obra literaria además de infinitamente más emotiva.
Adjetivice a sus personajes de manera a reforzar el mensaje. Los israelíes deben ser siempre extremistas y los palestinos moderados.
5- OBVIE O MINIMICE LOS EFECTOS DE LA VOZ CONTRARIA
Lo más recomendable es no incluir la voz oficial israelí.
Si no le queda más remedio intente diluir el posible efecto escondiendo la respuesta dentro de su crónica. Por ejemplo, si esta cuenta con 15 párrafos, sitúe la explicación israelí en el párrafo 13 o 12, y a ser posible emplee los restantes en desmontar el argumento expuesto por los malos.
6- ELIJA FUENTES IDEOLOGIZADAS
No toda fuente tiene el mismo valor. La que sin duda más puntúa es la ONG israelí. Muchas tienen una agenda abiertamente anti-israelí (evidentemente esa información usted no la debe incluir en su crónica) y pueden ayudarle a transmitir su punto de vista con mayor sello de legitimidad. La fuente palestina puntúa un poco menos, pero usted siempre puede ocultar su identidad. Así, si la fuente es Hamas, bajo ninguna circunstancia señale que se trata de un grupo terrorista.
Nunca publique información que pueda hacer quedar mal a su bando. Así, no se haga eco de noticias que hablen de incitación a la violencia o de educación en el odio en la Autoridad Palestina. Recuerde que usted ha decidido que son moderados y no puede permitirse que se llegue a sospechar lo contrario.
Si se ve en la obligación de publicar algo recurra a una declaración de algún fanático israelí. Puede que sea irrelevante, pero eso es lo de menos. Usted decide qué es relevante.
Este punto es clave. A la hora de hablar de una agresión el palestino siempre debe ser el objeto pasivo e Israel el sujeto activo. Si el ataque ha sido iniciado por el palestino, usted céntrese en la respuesta, transfórmela en causa del conflicto o del aumento de hostilidades.
Recuerde, la Historia no cuenta. Sólo cuenta la historia. La que usted quiere contar. Así, intente evitar remontarse en el tiempo para explicar cualquier cuestión relacionada con el conflicto entre israelíes y palestinos. Olvide que en 1948 los árabes rechazaron la partición y atacaron a Israel. Si tiene que mencionarlo hable de una guerra sin responsables.
10- TITULE DEJANDO CLARO SU MENSAJE
Recuerde que mucha gente no lee la crónica. Le basta el titular para comprender toda la complejidad de la situación, por eso usted debe ser conciso y claro. No transmita la historia, transmita su punto de vista.
OJO: esta receta es sólo válida para artículos que pretendan aparentar objetividad y profesionalismo en medios serios. Es para amantes del anti-israelismo políticamente correcto. No es suficientemente fuerte para escritos abiertamente anti-israelíes, pero son complementarios, ya que el objetivo es el mismo: la deslegitimación del estado de Israel.