Si el mapa – la interpretación, la representación – no se corresponde con la realidad que dice simbolizar, no es tal mapa. Queda, sí, una forma que, en este caso, es proyección de una ideología, de activismo – y que puede ser también de una conveniencia, contemporización, etc. -; mas, el rastro de la realidad que subsiste es meramente anecdótico, apenas el necesario para que algún desprevenido crea que, efectivamente, se trata de una representación cabal del conflicto.
Si el norte del periodismo es el punto de convergencia de su práctica escrupulosa y, acaso, del talento para realizarlo de manera interesante, con cierta gracia; la brújula profesional de la agencia de noticias apunta a cualquier lugar menos a ese punto ideal.
El conflicto árabe-israelí ha demostrado que el periodismo puede seguir cayendo más allá de lo que se creía era el fondo de los escrúpulos, donde la presión y la ausencia de oxígeno hacen imposible la vida profesional. Allí sólo sobrevive el activismo
Si en un previo artículo sobre la cobertura del atentado contra una sinagoga por parte de la agencia, se destacaba el activismo de la agencia y la voluntad de predisponer al lector en contra de una de las partes, una crónica posterior acerca de otro atentado y la alarma causada por este volvía a presentar un mismo tipo de problemas
Mucho esfuerzo se toma la agencia estatal española, primera fuente de información de incontables medios, en posicionar al lector en contra de Israel empleando un léxico partidista, despreciando la versión de una de las partes y equiparando a víctimas y verdugos.
Lo que sigue a continuación provocará seguramente en el lector la sensación de que ya ha leído lo que se dice. No una, sino varias veces. Que lo ha leído aquí. O, acaso, en alguna otra plataforma puntual: el sistemático silencio mediático en español sobre la realidad de Gaza
El New York Times parece haberse embarcado en una cruzada periodística para desacreditar a las comunidades judías ortodoxas de Nueva York, en particular a las jasídicas. La pieza central de esa campaña del NYT es su "investigación" de las irregularidades cometidas en y por las escuelas jasídicas, cuyos resultados se describieron inicialmente en un artículo de 6.000 palabras que ocupó la portada del periódico el 11 de septiembre de 2022
Hay una extraña forma de recoger, procesar y presentar la información sobre el conflicto árabe-israelí entre más de un medio en español. Se realiza una selección incompleta que casi siempre perfila una imagen concreta mediante la transformación u omisión de acciones y a través del uso de calificaciones que exceden la tarea informativa para adentrarse en la opinión. Además, dicha recolección se apoya por lo general en fuentes o, antes bien, voces interesadas.