Calentando motores y estableciendo los cimientos de la confusión, el 14 de mayo, 24 horas antes de las grandes manifestaciones, las medios de comunicación informan a sus lectores acerca de las protestas en el mundo árabe para conmemorar el llamado Día de la Naqba.
En sus reportes, estos mismos medios dan por válido un discurso oficial palestino en el que la Independencia del Estado de Israel se convierte en responsable del desastre del pueblo sin estado.
Así, la agencia argentina Télam informa de que:
Desde ayer hay un amplio despliegue policial en Jerusalén, de unos 3.000 agentes, para garantizar la seguridad durante el aniversario, mañana, de la Naqba (catástrofe, en árabe), que conmemora la persecución y huida de cientos de miles de musulmanes durante la creación del Estado de Israel en 1948.
Por su parte, para la agencia española EFE, principal proveedora de información en lengua española:
los palestinos de toda la región conmemoran el exilio y la desposesión que supuso para ellos la creación del Estado de Israel.
La fecha de la conmemoración es el 15 de mayo, un día después de la declaración de la independencia de Israel en 1948, fecha que los palestinos ven como el comienzo del exilio para cientos de miles de refugiados que actualmente, con toda su descendencia, superan los 4 millones.
En su portal latinoamericano, la agencia italiana Ansa da voz a uno de los protagonistas, que amenaza:
Este es un mensaje a Israel y a sus partidarios, que Jordania no tendrá descanso mientras todos sus refugiados no hayan vuelto a casa
Lamentablemente, ninguna agencia, y ninguno de los medios que se han hecho eco de la información, han considerado oportuno brindar a sus lectores una visión contextualizada que nos permita comprender más exactamente qué es la Naqba.
1- La Naqba (desastre en árabe) es el término utilizado actualmente para designar el éxodo palestino que tuvo lugar en 1948. Según la propia definición de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) los refugiados palestinos son las “personas cuyo lugar de residencia habitual era el Mandato Británico de Palestina entre junio de 1946 y mayo de 1948 y que perdieron sus casas y medios de vida como consecuencia de la Guerra árabe-israelí de 1948“.
Es decir, que el origen de la Naqba es la Guerra árabe-israelí de 1948. Una guerra que fue iniciada, no por Israel, sino por los países árabes. Éstos no quisieron aceptar la resolución 181 de la ONU, que establecía la creación de dos estados, uno árabe y otro judío. Recordemos que en la Declaración de Independencia de Israel, el primer ministro David Ben Gurion, tendió la mano a sus vecinos, proponiendo una oferta de paz y buena vecindad y exhortándolos a establecer vínculos de cooperación y ayuda mutua con el pueblo judío soberano asentado en su tierra. La respuesta fue una declaración de guerra de todos los países vecinos, y hasta no vecinos, como Iraq.
2- Durante dicha guerra, los líderes árabes huyeron y engañaron a su propio pueblo, incitándolo a abandonar sus casas, convencidos de que la guerra sería corta y ellos resultarían vencedores. No fue así.
El Alto Comisionado Británico para Palestina en ese momento, el General Sir Alan Cunningham, describió este fenómeno y su efecto sobre la población general:
Deben saber que en alguna medida el colapso de la moral árabe en Palestina se debe a la tendencia creciente a abandonar el país de quienes debían estar guiándolos. Por ejemplo, en Jaffa, el alcalde se fue con un permiso de 4 días hace 12 días y no ha regresado, y la mitad del Comité Nacional se ha ido. En Haifa los miembros árabes de la municipalidad se fueron hace algún tiempo; de hecho, los dos líderes del Ejército de Liberación Árabe se fueron durante la reciente batalla. Ahora, el magistrado superior árabe se ha ido. En todas partes del país, gran cantidad de personas de la clase effendi [élite] han estado evacuando por bastante tiempo y el ritmo está aumentando.
3- Los árabes que se quedaron en la zona israelí, son los árabes-israelíes, que viven en el Estado democrático de Israel. Constituyen el 20% de la población y gozan de los mismos derechos que cualquier otro ciudadano israelí, siendo incluso su lengua una lengua co-oficial del Estado. Aquellos que huyeron, siguiendo a sus líderes, se convirtieron en los refugiados palestinos. Éstos iniciaron un viaje a través del desprecio y la incomprensión de los países árabes, quienes los han utilizado como arma política. En esos países, los palestinos fueron hacinados en campos de refugiados, negados los derechos y la nacionalidad.
Dejando de lado su manipulación del número de refugiados palestinos (fueron unos 700.000), y el mutismo absoluto a la hora de hablar de los 800.000 refugiados judíos que debieron huir a partir de 1948 de los países árabes, hay que volver a señalar la peligrosa complicidad de los medios de comunicación con una de las partes del conflicto y con su versión distorsionada de la historia.
Magnificando por un lado, omitiendo por otro y acusando irresponsablemente a una de las partes, las agencias de noticias, y los medios que de ellas se hacen eco,sólo logran ampliar un mensaje de odio y de confusión, que en nada favorece a la región y que en mucho perjudica a sus lectores.