En los primeros tiempos de la minería, los mineros del carbón llevaban consigo canarios a las profundidades cavernosas de las galerías. Mientras extraían el mineral, los coloridos pájaros cantaban, llenando las sombrías cuevas con su alegre piar. Mientras los pájaros continuaran cantando, los mineros sabían que estaban a salvo.
Sin embargo, cuando los canarios callaban, los mineros sabían que metano, dióxido de carbono u otras sustancias nocivas habían entrado en su espacio de trabajo, lo que significaba que debían evacuar el lugar sin dilación.
Desde una perspectiva global, el Estado de Israel es considerado a menudo un canario en una mina de carbón.
Cuando Israel la única democracia en Medio Oriente es amenazado, otros países e individuos que comparten sus ideales occidentales pronto se enfrentan también a amenazas.
Inmediatamente después del restablecimiento de Israel en 1948, cinco países árabes vecinos lo atacaron, negándose a acoger al renovado estado en la región. Esta guerra preparó el terreno para años de hostilidad que Israel ha enfrentado por parte de sus vecinos árabes.
La vida en Sderot, Israel, ejemplifica esta hostilidad. Durante años, los ciudadanos de la ciudad han sufrido ataques con cohetes de Hamas – la organización que gobierna Gaza – casi a diario. Cuando los niños de Sderot corren a los refugios, habitualmente cantan para ahogar las aterradoras explosiones con melodías alegres, muy parecido a los canarios en las minas.
Y de hecho, aproximadamente en los últimos diez años, alrededor del mundo países occidentales se han enfrentado a un aumento del terrorismo.
Y sólo ayer, el terrorismo islamista asesinó a un soldado inglés que llevaba una camiseta con la leyenda Ayuda para los Héroes. Primero atropellaron al soldado con el automóvil, y luego procedieron a mutilarlo con cuchillos y cuchillas de carnicero.
Estos casos sólo son una muestra de los actos de terrorismo que han tenido lugar alrededor del mundo en los últimos años.
El escalofriante contraste entre el mensaje benévolo impreso en la camiseta del soldado británico y lo malévolo de los actos de sus atacantes extremistas, sin embargo, es un microcosmos de la actual disparidad entre los actos de los terroristas y los valores de sus víctimas.
De hecho, Israel, Estados Unidos e Inglaterra valoran por igual la libertad, la diversidad y las variadas formas de la democracia. Estos ideales los unen, especialmente de cara al terrorismo.
En su artículo de opinón, Las Naciones morales están junto a Israel, Mia Appelbaum, Michael Harris y Blair Hart Newman señalan la importancia de apoyar a Israel en su compromiso con los ideales morales. En sus palabras, Israel es una luz para las naciones que pueden, y así lo harán, protegerse a sí mismas y a todos los civiles inocentes del horror de la guerra.
A pesar del creciente terrorismo, Israel mantiene continuamente su inequívoco código moral.
Y por lo tanto, Israel se merece el apoyo de aquellos que comparten sus valores éticos, tal como Mia Appelbaum, Michael Harris y Blair Hart Newman de manera tan conmovedora explican. Sólo entonces los países, las organizaciones y los individuos afines podrán comenzar a luchar contra el crecimiento del terror.
Durante generaciones, los israelíes han cantando el Am Yisrael Chai, la Nación de Israel vive. La canción celebra, año tras año, la prosperidad de la nación y, por lo tanto, la continuidad de los valores que Israel, junto con sus aliados occidentales, tanto estiman.
Sólo esperemos que los defensores de la ética canten juntos, unidos como aliados, con Israel el canario mostrando el camino.
Original en inglés: CameraonCampus(29 de mayo de 2013)