Un viejo chiste ilustra magistralmente el funcionamiento mental antisemita:
– ¿Tus jefes son judíos? Seguro que te pagan una barbaridad, los judíos tienen mucho dinero.
– Bueno, la verdad es que no cobro tanto…
– Típico de judíos, que son unos rácanos explotadores.
Este mismo chiste sirve para resumir el programa de RTVE, En Portada, acerca del tranvía de Jerusalén (9 de octubre 2018).
Arranca explicando que el tranvía nació con polémica y reprochando que atraviesa la Jerusalén ocupada, pero apenas un minuto después se queja de que: La única línea del tranvía no atraviesa muchas zonas palestinas. Para muchos palestinos de Jerusalén como Alaá (joven entrevistada), el tranvía solo pasa de largo.
Si pasa, mal. Si no pasa, mal.
TRAMPA 1: PREGUNTAS RETÓRICAS
La primera entrevistada del programa es Alaá, una joven maestra árabe, que cuenta a la cámara su sufrimiento diario para ir a trabajar. La voz en off que traduce sus declaraciones al español con forzado dramatismo no ayuda a transmitir una visión rigurosa. El programa apuesta por un sentimentalismo sin búsqueda de contexto ni de análisis que permita al espectador acceder a la otra versión de los hechos.
Por ejemplo, Alaá explica a cámara que la relación entre israelíes y palestinos es una la relación de esclavo y verdugo:
Ellos son los verdugos y nosotros solo debemos obedecer sus órdenes, queramos o no.
Para transmitir esta idea, la joven encadena una serie de preguntas, que obviamente no buscan respuestas sino simplemente alimentar un estado de ánimo en el espectador. Hay que victimizar a la figura palestina hasta la caricatura.
Me imagino si no hubiera nada de esto. Si no hubiera controles y entonces me pregunto, ¿cómo llegaría al colegio?
¿Cómo sería entonces mi estado de ánimo?
¿Cómo recibiría a los alumnos?
Pero ¿Por qué tengo que pasar por todo esto?
De hecho, el recurso a las preguntas retóricas es una señal de identidad del programa dedicado a Jerusalén.
Así, Claudette Habash, una refugiada cristiana palestina que lleva al equipo a visitar un barrio y una casa, que afirma pertenecer a su familia, afirma:
La comunidad internacional tiene que explicarme por qué yo soy una refugiada. ¿Por qué me he convertido en una desplazada interna en mi propia ciudad, en mi Jerusalén?
Lo cierto es que hay respuestas a esas preguntas. Respuestas que no aporta el programa, porque todas apuntan a las decisiones tomadas por los líderes palestinos a los largo de su historia.
TRAMPA 2: LOS PALESTINOS AUSENTES
Y justamente estos son los grandes ausentes del programa: los palestinos. Es decir, aparecen una gran cantidad de árabes que hablan de convivencia y de cómo su vida se vio truncada por algo que jamás se explica.
Sus vidas cambiaron en 2002, cuando Israel levantó este muro. Condenado por el Tribunal Internacional de Justicia de la ONU, se construyó con el argumento de impedir la oleada de ataques suicidas contra israelíes en esos años.
Con el argumento de… como si fuera una mera excusa.
La llamada Segunda Intifada, esa gran ausente en el reportaje, se cobró la vida de más de 1000 israelíes en diferentes atentados terroristas. Pero mencionarla equivaldría a mencionar la responsabilidad palestina, que para RTVE es inexistente. Los palestinos sólo son víctimas.
De hecho, apenas hay menciones al terrorismo palestino en todo el programa. Asoma vagamente en un par de ocasiones, sin datos concretos, sin números, sin nombres, como una nebulosa. No obstante, sí hay tiempo para hablar de los colonos israelíes que secuestraron a un palestino, de 16 años, al que después quemaron vivo.
(Por cierto, recordemos que los responsables de ese crimen están en la cárcel, alguno incluso condenado a cadena perpetua, mientras que los responsables de los atentados terroristas palestinos, que no tienen cabida en En Portada, cobran salarios como recompensa por sus crímenes por parte de la Autoridad Palestina).
También nos hablan de los tiempos de los atentados sionistas contra los británicos, que según el programa hicieron que los palestinos huyeran de Jerusalén. Incluso, Claudette Habash cuenta cómo su padre fue testigo indirecto de cómo un sionista manipulaba una bomba que después explotó.
Es decir, En Portada aporta el testimonio de la hija de alguien que conoció a un judío que quiso poner una bomba en los años 30, pero no pudieron encontrar a ninguna víctima reciente israelí que les cuente su experiencia y que pueda explicar esas medidas de seguridad que tanto parecen indignar a los periodistas de RTVE… Como si faltaran víctimas del terrorismo en Israel.
TRAMPA 3: MANIPULACIÓN HISTÓRICA
En esa misma línea de anular cualquier responsabilidad de los líderes palestinos en el destino de su gente, En Portada habla de las guerras, pero éstas siempre estallan así, de la nada. Se intuye que la causa es la mera presencia de Israel, pero nadie aclara que las guerras fueron, todas y cada una de ellas, iniciadas por los países árabes. Y no para crear un estado palestino, sino para exterminar hasta el último judío. Les salió mal.
RTVE obvia totalmente la historia y presenta los hechos como surgidos por generación espontánea. Así presentan a otro entrevistado, Gideon Briger:
En el 48 se proclamó el Estado de Israel y se produjo la primera guerra árabe israelí. La ciudad quedó dividida en dos. En 1967, Gideon participó en la Guerra de los 6 días por la que Israel se apropió de Cisjordania, Gaza y el este de Jerusalén.
Una historia sin responsables, en la que los hechos se producen a sí mismos por generación espontánea. Una historia en la que Israel se apropia de aquello que sí se habían apropiado Jordania y Egipto en una guerra de agresión.
Interesantes también estas afirmaciones de Claudette Habash sobre los israelíes:
Gente que ha venido de Europa. Los palestinos no hicimos nada malo contra los judíos, pero estamos pagando el precio de los horribles hechos de los años 40 en Europa
Tanta mentira en dos frases sucintas… y el micrófono de RTVE para que se expanda sin problemas.
1- Los judíos no vienen de Europa.
2- Israel no se establece a causa del Holocausto.
3- Desde los años 20, los judíos que ahí habitaban fueron víctimas de pogromos y persecuciones por parte de los árabes, hostigados por el aliado de hitler: el gran muftí de Jerusalén.
Curiosamente, el mismo día que el segmento de la televisión pública española emitía un programa en el que intentaba transmitir la imagen del judío como extranjero, usurpador de tierras (gente que ha venido de Europa, colonos; Judeización de Jerusalén llega incluso a decir un periodista entrevistado), se presentaba al público la mención a Jerusalén más antigua en hebreo. Data de hace unos 2000 años, de la época del Segundo Templo. Cuando aún ni siquiera existía el Islam.
TRAMPA 4: TÓPICOS Y MANIPULACIONESEl prejuicio no necesita ningún dato para ratificar sus mentiras. Al contrario, los hechos de la realidad estorban sus propósitos. Juega con una lluvia de códigos de sobreentendidos que caen en un terreno previamente abonado.
Así, En Portada ofrecía toda una serie de tópicos erróneos que no se sostienen ante el primer análisis riguroso.
Un ejemplo de esas informaciones a medias, que el programa colaba, afirmaba que Israel tomó la decisión de:
expropiar a las iglesias las tierras y cobrarles impuestos por sus propiedades”
Lo cierto es que dicho proyecto legislativo fue impulsado por la diputada Rachel Asaria, del partido de centro Kulanu. La parlamentaria explicó que solo afectaba terrenos ya vendidos a inversores privados y que nunca se tocarían terrenos que siguieran siendo propiedad de la iglesia.
Otro ejemplo de tópico falso vertido en En Portada:
los asentamientos levantados ilegalmente en el Este. Según el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, esto vulnera la IV Convención de Ginebra que prohíbe transferir población civil a territorio ocupado.
¿Ilegales según qué ley? No hay ninguna legalidad internacional que haya declarado ilegales los asentamientos. Más allá de que exista un debate legal y político (sobre todo, esto último) al respecto y que la ONU no crea jurisprudencia, citar precisamente al Consejo de Derechos Humanos de la ONU como una referencia parece un chiste. El mismo consejo integrado por miembros como China, Cuba, Catar, Arabia Saudita (que está en la Comisión sobre el Estatus de la Mujer), Venezuela…
Es más, ya que hablan de legalidad y del tranvía de Jerusalén, ¿por qué oculta el programa que precisamente a raíz de ese contencioso, se declaró en los tribunales, que no hay ninguna ilegalidad al respecto? La Corte de Apelación de Versailles dictaminó el 13 de marzo de 2013 que la ocupación israelí de territorios reclamados por los palestinos no es ilegal.
En marzo de 2013, la decisión judicial ponía fin a un largo proceso iniciado por la (ASPF) y la propia Organización para la Liberación de Palestina (OLP) representada en la figura del mismísimo Mahmud Abbas.
La Asociación Francia-Palestina Solidaridad ASPF y la OLP denunciaron en febrero de 2007 a las compañías francesas Veolia Transport y Alstom Transport SA por haber construido, tras licitación, el tranvía de Jerusalén por atravesar la ciudad hasta el este, parte reivindicada por los palestinos.
Respecto a la ocupación, para su denuncia, la OLP y la ASPF recurrieron a esos artículos existentes en las convenciones de Ginebra y de La Haya de 1907 y 1954. Pero la Corte de Versailles especificó que no son aplicables dichos artículos porque en primer lugar, esos acuerdos se aplican a Estados, y ni la Autoridad Palestina ni la OLP lo son. En segundo lugar, esos textos hacen referencia a las partes contratantes y ni la OLP ni la Autoridad Palestina firmaron nunca esos documentos.
Pero sigamos con las cuestiones legales y la manipulación de RTVE.
Posteriormente entrevistan a un activista israelí, Meir Margalit, que justifica que los palestinos construyan sus casas ilegalmente:
Un tercio de todas las casas en Jerusalén son ilegales; pero ilegales, no porque la gente es criminal, sino porque si no te dan permiso, no te queda más remedio que construir de forma ilegal. Ellos construyen, viene el municipio y las destruye. Demuele casas palestinas. Lo que es un drama, una tragedia, porque para el palestino la casa es mucho más que la suma de los ladrillos y el acero y la arena y las piedras. Para el palestino, la casa es el mundo entero.
En resumen: En Portada inventa una ley según la cual los israelíes estarían haciendo algo ilegal, y eso estaría mal. Pero si los palestinos hacen algo que el código jurídico del país democrático en el que viven, califica de ilegal, entonces está bien porque sólo responden a razones emocionales.
TRAMPA 5: EL ISRAELÍ QUE NO REPRESENTA A ISRAEL
Y no sirve ampararse en que quien habla es un entrevistado, porque la selección de las fuentes le corresponde precisamente al programa. Ellos son también quienes tienen que poner en contexto las palabras de quien habla. Repreguntar. No basta con poner un micrófono y lavarse las manos mientras se permite que los prejuicios y las mentiras se explayen a sus anchas.
Y en esa selección de fuentes y de declaraciones vuelve a aparecer otra trampa: los israelíes que toman en micrófono o bien no representan la postura mayoritaria israelí, o bien no se les permite desarrollar sus ideas.
Así, en la entrevista al citado Meir Margalit, que supone la primera y casi única mención al terrorismo pero para referirse a la decisión de la administración americana de mover la embajada a Jerusalén.
Un acto de terrorismo. Hay terroristas que ponen bombas en la ciudad y hay terroristas que traspasan la embajada de Tel Aviv a Jerusalén. Este es un acto de terrorismo estratégico, incluso.
La verdad es que en un programa que no se menciona uno sólo de los atentados de los que han sido víctima los israelíes a lo largo de su existencia llama la atención tanta vehemencia para tildar una decisión como esta de terrorismo.
Y, ¿por qué En Portada no explica quién es Margalit? Se limitan a afirmar que es: “activista y escritor”. Pero ¿qué clase de activista” es?
Lo que RTVE oculta es que Meir Margalit es empleado de la ONG Comité Israelí Contra la Demolición de Casas, según da cuenta NGO Monitor. Esta ONG utiliza una retórica anti-israelí que incluye las acusaciones más inverosímiles, como que el Estado judío es un apartheid, que practica la limpieza étnica y el genocidio.
También sorprenden las palabras de la teniente de alcalde, Yael Antebi, que afirma:
Yo no sé mucho de seguridad, pero pienso que igual cantidad de seguridad podría haber sin la valla.
¿Entonces? Si no es experta en seguridad, ¿por qué le preguntan por la seguridad? ¿Tal vez porque transmite esa idea de israelíes arbitrarios sin justificación que En Portada persigue desde el principio? ¿Y por qué el único argumento que encuentran para explicar la existencia de la valla, es un confuso e irrelevante comentario de uno de los entrevistados (que decía que los que ven la valla son sólo: los que están cerca del muro que son la minoría de la minoría porque están en la punta)? ¿Es lo único que pudieron encontrar?
Porque la verdad es que no hace falta ser experto en seguridad para encontrar números que hablan por sí solos:
Desde el estallido de la llamada Segunda Intifada, en septiembre del año 2000 y hasta el año 2007, 1.213 israelíes fueron asesinados y 8.342 resultaron heridos en múltiples ataques y atentados cometidos por terroristas palestinos. Esos que En Portada olvida mencionar.
A partir de la construcción de la Valla/Muro (aproximadamente el 95% es una valla de alambre, sólo el 5% está constituido por el muro, en lugares estratégicos concretos, para evitar ataques de francotiradores palestinos, la cantidad de ataques empezó a descender dada la dificultad física de cometer atentados en Israel, llegando a prácticamente 0. De 220 muertos en 2002 se pasó a 3 en el año 2007.
TRAMPA 6: ERA TODO UNA EXCUSA PARA TRANSMITIR UN MENSAJE ANTISEMITA
Si desde el principio del texto podíamos comprobar que daba igual si el tranvía pasaba o no por barrios del Este de Jerusalén, ya que hiciera lo que hiciera estaba mal, en mitad del programa tiene otra interesante frase a la hora de hablar del Shabat:
Los judíos ultra ortodoxos, o jaredím toman entonces la calle.
Cualquiera que haya estado en Jerusalén sabe que tanto en Shabat como en el resto de la semana, tanto judíos religiosos como no judíos, o judíos laicos caminan a sus anchas. De hecho, en las mismas imágenes que RTVE muestra, se ve a no ortodoxos paseando. Pero el medio parece tener una imperiosa necesidad de identificar al judío y al israelí con un mundo religioso oculto y poderoso.
Pero sin duda, la frase que resume perfectamente el programa y que permite que el espectador comprenda qué se oculta detrás de tanta trampa, es una de las frases finales.
A pesar de la pretendida convivencia los judíos son mayoría.
Dicho de otro modo, según RTVE no se puede convivir cuando los judíos son mayoría. Eso tiene un nombre. Aunque lo quieran disfrazar de periodismo, no deja de ser una pieza más de difamación y manipulación.