El pasado 29 de noviembre, La Prensa Gráfica de El Salvador publicó una nota prominente, titulada “Una Cárcel a Cielo Abierto”. El artículo contiene una presentación fotográfica de pobladores palestinos en la Cisjordania, destacando la Valla de Seguridad construída por Israel. El reportaje, escrito por “Fotorreportaje de Agencias”, declara que:
El Vaticano se sumó de forma reciente a las voces de rechazo; esas que ven en el muro, cuya construcción no ha finalizado, un claro signo de estancamiento en la lucha por la paz en Oriente Medio.
En realidad el muro no representa un estancamiento en la lucha por la paz en Oriente Medio, sino todo lo contrario. Al momento de comenzarse la construcción del muro, en 2002, no había paz, ni para israelíes, ni para palestinos. Los ataques de explosiones homicidas-suicidas de palestinos provenientes de Cisjordania (con Gaza ya existía una valla de seguridad) habían costado la vida, hasta ese momento, a 444 civiles israelíes (de los cuales 80 eran menores de 18 años) y no lograban ser controlados. El ejército israelí recurría a entrar a la Cisjordania periódicamente, lo cual costaba otras tantas vidas de civiles palestinos y de soldados israelíes. La valla de seguridad trajo paz a la región. Es más, en aquellos lugares en los que la valla no estaba terminada, continuaron las explosiones suicidas, las cuales terminaban de inmediato una vez que la valla llegaba a la zona. El hecho es que las explosiones homicidas-suicidas han terminado desde que la valla se erigió. Es por eso que sorprende que el periódico no remarcara esta realidad: esta medida tomada por las autoridades israelies para contener el terror y proveer seguridad a los pobladores civiles en ambos lados ha sido un éxito. Si bien es cierto que la valla trae incomodidad a los pobladores de la Cisjordania, es un bajo precio a pagar a cambio desalvar vidas humanas. Todos los días, cientos de personaspierden horas de tiempoen puestos de seguridad en aeropuertos y otros lugares, mostrando sus papeles de identidad. El terrorismo ha creado ese problema. El problema no lo crearon las fuerzas de seguridad que protejen a los civiles. El artículosolo menciona al pasar que la valla no hubiera sido construída sino hubiera sido por la violencia practicada por los pobladores de la Cisjordania.
Es más, en estos últimos meses, la situación de la Cisjordania y el bienestar de sus pobladores palestinos ha gozado de notables progresos. La economía de la Cisjordania ha crecido entre el 5 y el 7% a pesar de la crisis económica mundial y se proyecta un crecimiento del 10 % en el próximo año. En este artículo (en inglés) que contiene una entrevista a Tony Blair, embajador del Grupo de los Cuatro a los territorios en disputa (Cisjordania y Gaza), éste remarcó los progresos en la Cisjordania y su crecimiento actual. Es muy posible que la valla haya sido esencial en mantener la seguridad necesaria para permitir que estas importantes mejorías ocurrieran. Sería sumamente interesante para sus lectores que La Prensa Gráfica escribiera sobre los progresos económicos en la Cisjordania los que sin duda establecen una fundación sólida para el establecimiento de una paz duradera entre israelíes y palestinos. Israel ha ayudado activamente en este reciente desarrollo de la Cisjordania y a consecuencia del mismo ha desmantelado 140 puestos de guardia. Esto demuestra que ni la valla de seguridad ni los puestos de control existirían si los pobladores palestinos se encontraran embarcados en actividades de paz y no de guerra.
Para la comunidad internacional, el muro, considerado ilegal, seguirá causando un daño a largo plazo en la vida de los palestinos, puesto que mina las posibilidades de habitar docenas de pueblos y comunidades.
En realidad, no se conoce ni un caso en el cual la valla de seguridad mina las posibilidades de habitar docenas de pueblos y comunidades. La Prensa Gráfica debería citar aunque sea una docena, o media docena o tan siquiera una comunidad o pueblo que no se habita por razón de la valla de seguridad.
En otra inscripción se lee: “Los niños palestinos madrugan si quieren llegar a tiempo a sus escuelas en territorio israelí”. Esto es completamente inventado ya que los niños palestinos de la Cisjordania van a la escuela en la Cisjordania. No hay escuelas en territorio propiamente israelí (al oeste de la valla) que enseñen a niños palestinos de la Cisjordania.
En otra inscripción se lee: “Miles de palestinos han protagonizado numerosas protestas desde la construcción de la valla de seguridad, la que, cuando esté terminada, medirá 700 kilómetros de largo y entre 50 y 70 kilómetros de ancho.”
El ancho de la valla es de 50 metros, no kilómetros. Y los manifestantes, como se explica arriba son cien o doscientos por vez, y la mayoría son israelíes y extranjeros que embanderan programas de izquierda, según ellos mismos.
Dado que La Prensa Gráfica dedica este artículo a la valla de seguridad entre Israel y la Cisjordania, la pregunta es si publicará también otros artículos sobre otras vallas de seguridad alrededor del mundo. La valla entre Israel y la Cisjordania ciertamente no es única. La siguiente lista contiene muchas otras (más detalles pueden leerse aquí):
Iraq-Kuwait: 120 millas, 10 pies de altura
India-Pakistán: 330 millas, 12 pies de altura
Iran-Pakistán: 435 millas planeadas, 10 pies de altura
Israel-Cisjordania: planeado total: 436 millas
España-Marruecos: 6 millas- 10 pies de altura
Padua, Italia: en el medio de la ciudad, para aislar grupos mayormente de africanos, 275 pies y 10 pies de altura
Baghdad, Iraq: separar los sunis de los shiitas: 3 millas, 12 pies
A lo que se debe agregar la resolución del Congreso de Estados Unidos, (HR 6061), aprobada en el senado norteamericano el 29 de setiembre de 2006 por un voto de 80 contra 19 de construir una valla de 700 millas (1.125 km) en el límite con México. Parte de esta valla ya está construída.
Hubiera sido valioso para el lector que La Prensa Gráfica comparara en este artículo la valla de seguridad entre Israel y la Cisjordania y su razón de existir: salvar vidas humanas, con las razones por las que otras vallas del mundo se han construído: para impedir que la gente entre a un país para trabajar por ejemplo y no para defender a los ciudadanos del país contra ataques homicidas.
En resumen, este artículo de La Prensa Gráfica, además de contener innumerables errores informáticos, padece de muchas omisiones: Primero, omite el contexto para la construcción de la valla por parte de Israel, o sea, el mantenimiento de la seguridad y la paz y la obstrucción del movimiento de los terroristas. Segundo, omite el contexto mundial de construcción de vallas en muchos otros lugares para la solución temporal de problemas entre dos pueblos (o sea, la valla de Israel no es la única, ni la primera, ni la última). Tercero, carece de actualización de la situación de progreso en la Cisjordania por el cual los palestinos, en una situación de paz y seguridad, están gozando de importantes avances económicos con la ayuda del resto del mundo y de Israel, progreso que si se mantiene en forma pacífica, permite remover puestos de seguridad y finalmente, la valla misma. Cuarto: omite escribir que los manifestantes son en su mayoría no-palestinos y que las manifestaciones tienen un contenido político y no tienen nada que ver con los intereses locales de los palestinos. El mencionar todos estos factores hubiera permitido conocer la verdadera historia de la valla de seguridad entre Israel y la Cisjordania.
