La exportación de armas por parte de España se ha cuadruplicado en los últimos seis años. Venezuela e Irán encabezan la lista de clientes. La prensa continúa centrando sus críticas en la venta de armas a Israel, a pesar de que Jerusalén compra menos del 0.08% del total de estas exportaciones.
La venta de material armamentístico por parte de España hacia Israel es uno de los temas recurrentes dentro de la prensa española.
La postura hegemónica de los periódicos españoles y de los medios de comunicación en ese país consiste en lanzar duras críticas al gobierno socialista de Zapatero por comerciar con Israel. Por su parte, un sector de la sociedad civil suma su voz a estas críticas, como se demostró durante el programa de televisión Tengo una pregunta para usted (TVE del 26 de enero de 2009), cuando uno de los miembros del público preguntó al presidente Zapatero sobre el tema. Este último respondió que la cifra del comercio con Israel era absolutamente insignificante y que, en cualquier caso, los materiales que España había vendido a Israel no se han usado para matar a palestinos
A menudo, las noticias se centran exclusivamente en la crítica de venta de armamento por parte de España hacia Israel, a pesar de que las ventas a Israel no alcanzan ni siquiera un 0.08% de estas exportaciones.
El País –
Un ejemplo contundente de la politización de este tema en la prensa es el artículo del siete de junio de 2010 en El País, que provee una lista de los países receptores de las exportaciones de armas españolas y cita a Israel a la cabeza de la lista de destinos de especial sensibilidad.
Escribe El País:
El desglose de los 474,2 millones vendidos fuera de la UE y la OTAN (el 35,2% del total) merece un análisis más pormenorizado, pues, como reconoce Comercio, en ese bloque figuran los “destinos de especial sensibilidad”. A continuación se detallan los más polémicos:
– Israel. Las ventas a ese Estado en 2009 ascendieron a 790.635 euros (frente a 2,35 millones en 2008). Según el informe, esta cantidad incluye componentes de pistolas deportivas; disparos para pruebas de una torreta que equipa a vehículos de la OTAN; piezas de aeronaves que fueron devueltas tras ser enviadas por error a España; tarjetas electrónicas de procesado de imágenes para equipos con destino a Brasil; y sistemas de lanzamiento de un misil que equipa al Ejército español. Además, se vendieron cartuchos de escopeta por 127.567 euros. Mucho más importante, sin embargo, es el hecho de que en 2009 se autorizaran -y aún no se habían materializado a final de año- ventas a Israel por 2,8 millones, de los que 2,5 corresponden a bombas, cohetes y misiles.
– Marruecos. Compró material militar por 31,12 millones de euros, frente a los 113,90 millones de 2008. Entre lo vendido figuran 286 vehículos todoterreno, piezas de aviones y repuestos de armas ligeras. Pese a esta reducción, las operaciones autorizadas y pendientes de materializar suman 50,5 millones.
– Colombia. Compró un avión de transporte, con el correspondiente apoyo logístico y repuestos, por 33,3 millones.
– Venezuela. España vendió a Venezuela material antidisturbios por 841.692 euros. Además, se autorizó la venta de siete buques por 925 millones.
La redacción de El País no podría haber puesto más ampliamente en evidencia su tratamiento sesgado hacia Israel comparado con otros países. A Israel la cita primero en la lista y le dedica más espacio y palabras que a ningún otro país. Pero lo hace sin ninguna razón y sin seguir ningún criterio periodístico.
Israel no es el destino que más exportaciones recibió, sino uno de los que menos, y tampoco es el primero por orden alfabético. Ubicar a Israel a la cabeza de la lista no tiene otro motivo que destacarla y diferenciarla de otros países. Es más, el periodista hace un escrutinio incisivo y describe punto a punto cada uno de los productos que España vendió a Israel, tarea que no repite en ninguno de los otros casos, lo que pone de manifiesto la manipulación informativa a través de una evidente parcialidad en la presentación de la información, tanto desde el punto de vista de la forma como del contenido.
El lector se pregunta ¿Por qué es Israel citada primero y por qué se le dedica tanto espacio? Entre tanto, Irán ni siquiera es mencionado en el texto (a pesar de haber comprado material de doble uso por 67 millones de euros). Además, las ventas a Venezuela apenas se describen, a pesar de que, junto con Irán, es uno de los dos mayores clientes de España.
En la noticia publicada por la redacción del diario ADN, Israel es citado como ejemplo, en primer lugar, como uno de los destinos preocupantes de las exportaciones de armas por parte del Gobierno de España. Israel es mencionado junto a Sri Lanka (donde se practica la desaparición forzada, ejecuciones extrajudiciales, tortura y malos tratos, reclutamiento forzoso, violencia sexual) y Marruecos, un país no democrático.
Desde principios del 2009 ya habían comenzado los diarios españoles a enfocarse en las ventas de material armamentístico a Israel en forma exclusiva, sin ponerlas en el contexto de todas las ventas de España, incluídas las que tenían como recipientes a países autoritarios, como Venezuela, Irán, Sri Lanka y Marruecos. Periódicos como Diario Directo y Público.es desglosaron en sus artículos solamente las ventas a Israel.
Artículo completo hacer click aquí.
Los hechos: España dispara la exportación de armas
Según el informe de 2009 del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo de España, las exportaciones de armas desde ese país han crecido en cerca de 1.000 millones de euros en los últimos seis años. España ha pasado de exportar menos de 400 millones en 2003 a casi 1.400 en 2009. Y lo más preocupante de este suceso es que países como Irán y Venezuela encabezan su lista de clientes.
Venezuela se convirtió en el primer destino para la venta de armas españolas. España autorizó la venta de material de defensa a Venezuela por valor de 945 millones de euros, casi cuatro veces más la cantidad vendida a su segundo cliente en importancia.
Por su parte, Irán figura como el primer comprador de material español de doble uso, si bien Teherán no figura en las estadísticas de material bélico per sé, el país de los ayatolás y de Mahmud Ahmadineyad compró a España 67 millones de euros en material de doble uso, sólo en 2009. Así, Irán supera con creces al resto de clientes en esta categoría.
Cabe destacar que España vendió este material a Irán a pesar de que en marzo de 2007 y abril de 2007 la ONU y la UE, respectivamente, aprobaron un embargo de armas y equipo de doble uso contra ese país.
Además, tanto el comprador como el destinatario en el caso iraní fueron entidades públicas. Entre los productos vendidos a Irán se incluían robots, instrumentos de medida, simuladores de movimientos y centros de mecanizado, entre otros, según el informe del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo de España.
Por su parte, Irán también intentó comprar material que podría ser utilizado para fabricar bombas nucleares, como centrifugadoras. Sin embargo, seis de estos pedidos fueron cancelados por las autoridades, y así quedó registrado en las estadísticas del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo de España.
Para leer el informe completo de las exportaciones de material bélico de España hacer click aquí.
Los periódicos mencionados, El País y ADN, así como previamente Público.es y Diario Directo, destacan en forma singular a Israel a sus lectores sobre el tema de las exportaciones armamentísticas de España, las cuales han crecido exponencialmente en el último año. Israel es señalado en lugar de Venezuela o Irán, Marruecos o Sri Lanka, como el país más preocupante, citado a la cabeza de todos, cuando la exportación a Israel no alcanza el 0.1% del total exportado y es menor que la de los otros países.
Usar a Israel como emisario para el ataque al gobierno de Zapatero y las exportaciones armamentísticas se puede explicar de una sola forma: pareciera que cualquier asociación con Israel que haga una institución privada o pública en España es la mejor manera de promover la condena por parte del público. Israel, la sola palabra, parece cargar suficiente valor condenatorio como para que no haga falta proveer los hechos o justificar los cargos.
Los periódicos españoles citados carecen de calidad periodística y de ética profesional al practicar una labor politizada y diseminar el odio con artículos de enfoque sesgado y la manipulación de la información para sus lectores.