El 11 de octubre, el diario El Mundo publicaba un artículo de Isabel Pérez, su enviada en Gaza: Israel bombardea la casa de una familia de Gaza matando a la madre embarazada y su hija de dos años
Ya desde el títular el artículo estaba equivocado, ya que Israel no bombardeó la casa, sino los alrededores. En cualquier caso, la periodista insistía en negar esa parte de la información, centrando su artículo en la incomprensión de por qué Israel eligió a una mujer embarazada y su familia como blanco de sus ataques.
La periodista de El Mundo aclaraba:
lo cierto es quela casa se encuentra a tres kilómetros del primer sitio militar palestino y todavía más lejos de la zona militar bombardeada
1- ¿Entonces? ¿La zona bombardeada había sido una zona militar? No se entiende esta frase, que incurre en contradicción con la tesis defendida por la periodista.
2- El propio Hamas dio una versión distinta de los hechos. Tal y como recogía la agencia EFE:
“Según el portavoz del Ministerio de Sanidad en Gaza, Ashraf Al Qedra, su vivienda se vino abajo tras el bombardeo de la aviación israelí con dos misiles aire-tierra que impactaron en las proximidades”