Resulta casi pueril la obsesión de la agencia EFE por presentar a sus lectores la imagen de un Israel diabólico, y uno podría sonreir ante ese enconamiento si no fuera porque sus crónicas corren como la pólvora, difuminándose por todos los medios y fomentando cada vez más la deslegimación de Israel.
El último ejemplo (02 de marzo de 2013) titula a bombo y platillo:
Israel pondrá autobuses solo para palestinos para que no usen los regulares
Dicha nota de la agencia se basa en una información del diario Ynet que informaba:
¿De dónde saca EFE la interpretación para que no usen los regulares? De las declaraciones de un chófer:
“No nos permiten negar el servicio y no ordenaremos a nadie que se baje del autobús, pero, por lo que nos han dicho, a partir de la semana que viene habrá controles en el puesto de control (militar) y pedirán a los palestinos que se suban a sus propios autobuses”, declaró a Ynet un conductor de Afikim, la empresa de transportes que tiene la franquicia en la zona.”
¿Quién lo ha dicho? ¿Afikim? ¿Una fuente militar? ¿El Ministerio de Transporte israelí? No sabemos.
La única declaración oficial que podemos leer en la nota de EFE al respecto es:
Las nuevas líneas, asegura Transportes, “no son líneas separadas para palestinos”, sino que pretenden mejorar los servicios ofrecidos a los trabajadores palestinos y reemplazar a “líneas irregulares, piratas, que cobran precios muy caros a los pasajeros palestinos”, además de “reducir la congestión, lo que beneficiará tanto a palestinos como a israelíes”.
Nada que ver con el titular.
Pero por si acaso alguien pudiera creer al Ministerio, EFE aporta una matización:
“Aunque Transportes asegura que la nueva línea forma parte de la red general, solo se ha informado de su existencia en los pueblos palestinos con panfletos escritos en árabe y no en las colonias judías en la misma zona de Cisjordania. “
¿Y? Si es para aliviar un problema con los trabajadores palestinos, ¿dónde más informarlo?
A priori, y sin mayor información Ynet no la tiene y EFE no la busca sólo parece un servicio adicional para solucionar un problema de transporte y seguridad.
De hecho, EFE olvida, qué casualidad, incluir una declaración oficial que sí incluye Ynet y que especifica que:
“El Ministerio de Transporte tiene prohibido impedir a cualquier pasajero subir a cualquier línea de transporte público, y tampoco sabemos de ninguna directiva en ese sentido. Instaurar estas líneas se hizo con el conocimiento y acuerdo total de los palestinos“.
¿Entonces? ¿Cómo es posible que una información que incluso podría ser leída desde una perspectiva positiva se convierte en una soterrada acusación de racismo?
Es este un tema polémico y complejo que requiere una explicación y no un titular tan manipulador, basado en las declaraciones de un chófer y que ignora lo que dice el Ministerio de Transportes.
Pero es que es mucho más apetitoso y acorde a una agenda política determinada mostrar una imagen negativa de Israel. Sin matices. Sin preguntas. Incluso sin datos.