Gaza es Guernica, proclama Atilio A. Boron en Página12 de Argentina.
Al leer el artículouno sienteque profundas convicciones que Boron debe haberguardado por años pueden ahora salir felizmente a la luz gracias al ataque en defensa propia que Israel llevó a cabo en Gaza. Sin haber puesto un pie en Gaza, sin haber corroborado ni la más mínima parte de las noticias que circulan, Boron se lanza exultante y desabotonado a proclamar todas y cada una de las siguientes ideas: 1- Que los líderes de Israel son “auténticos herederos de la barbarie nazi”, discípulos de Hitler y de Goering 2- Que los habitantes de Israel se han empezado a dar cuenta de eso 3- Que los líderes de Israel son enemigos del pueblo judío y que los habitantes de Israel se han empezado a dar cuenta también de eso 4- Que lo que Israel hizo en Gaza es una masacre comparable a los bombardeos de napalm en Vietnam por parte de EEUU y a la limpieza étnica de Milosevic. Pero que ”a lo que más se parece es a la infame y cobarde agresión que el régimen nazi y su aliado fascista en Italia descargaron sobre Guernica.”5- Que Israel por supuesto tiene que existir, pero que sufre de una “ilegitimidad de origen” porque está en territorio robado y por eso pasa todo lo que pasa.
Un respiro hondo acá…
¿Por dónde empezar?
Por el comienzo de su artículo:
Sería redundante pretender inventariar una vez más la interminable cantidad de atrocidades cometidas por Israel en Gaza, juicio este que es avalado inclusive por personas e instituciones que durante décadas le brindaron su más irrestricto respaldo.
Con esta introducción Boron pretende que suspendamos nuestro juicio, ya que es “redundante” y claro lo que él nos dice, “avalado por personas e instituciones…”, ninguna de las cuales cita. En el medio ya utilizó la palabra “atrocidades” para ponernos en el riel adecuado. Más abajo en su artículo, Boron ofrece otros calificativos, agotando toda la lista de sinónimos: “masacre”, “carnicería”, “barbarie” y “salvajada” y sin perderse el de mayor peso: “genocidio” . Luego de pasada la etapa linguística la pregunta es qué hay de verdad y cierto en todo esto. En qué se basan estas afirmaciones y en qué realmente cree Boron. Porque a la postre, si bien estamos en la sección Opinión, Boron y Página12 se ocupan de periodismo, profesión para la cual existe un código de ética: ofrecer a los lectores sólo la verdad, chequear la información, opinar con veracidad y no fomentar el odio.
De corresponsales que han estado en Gaza – periodistas que entraron en la franja apenas pudieron y reportaron desde allí libremente – escuchamos la siguiente información:
Escribe Tim Butcher, desde Gaza, en el Telegraph de Londres (20/1/09):
Una cosa está clara. Gaza en 2009 no es Stalingrad en 1944. No ha habido bombardeo masivo de grandes áreas, ni bombas incendiarias a suburbios enteros. Los blancos fueron seleccionados y alcanzados, a veces más de una vez, pero siempre con municiones de precisión. Edificios cercanos han sido dañados y han habido algunos errores (como el bombardeo al edificio de la ONU). Pero, en casi todos los casos, los blancos primarios recibieron casi todo el fuego.
Y más abajo en el mismo artículo:
En general, quedé muy impresionado de qué pocos cambios encontré en Gaza. Ya era enclenque, mal mantenida por décadas, y la presencia de lugares nuevos bombardeados sobre calles ya llenas de cosas rotas y edificios rudimentarios no ha hecho mucha diferencia.
Gaza en 2009 no es Stalingrad en 1944 y tampoco es Guernica en 1937. Estas declaraciones de un corresponsal que visita Gaza desde hace años y que está siendo testigo de lo que escribe, están en marcada contradicción con las descripciones ofrecidas por Boron en Página12. Los bombardeos fueron obviamente quirúrgicos, hechos con claras intenciones de causar el menor daño colindante posible y de aterrizar en edificios que albergaban terroristas o sus municiones. Gran diferencia entre lo que realmente ocurrió y lo que reporta un corresponsal responsable y el “genocidio” que pinta Boron en Pagina12.
No sólo un periodista corresponsal en Gaza pero también un oficial de alto rango, el coronel británico Richard Kemp, consejero en jefe sobre temas militares del gobierno de Inglaterra, hablando en la BBC, declaró:
No ha habido nunca en la historia de las guerras ningún otro ejército que haya hecho más esfuerzos por reducir las pérdidas civiles y las muertes de personas inocentes que el IDF (Ejército de Defensa de Israel, en sus siglas en inglés) actualmente en Gaza.
Las acusaciones insolventes de Boron se desvanecen como si por magia ante estos testimonios y declaraciones. Es que nada se resiste a la verdad. Porque en realidad, los soldados israelíes buscaban a los militantes de Hamas y no tenían la intención de matar civiles, sino de evitar que eso ocurriera en todo lo posible.
¿Cómo es entonces que tantos civiles murieran o fueran heridos?. Yendo nuevamente en busca de primeras fuentes, el corresponsal Lorenzo Carmonecci del Corriere de la Sera, diario italiano (en su versión en la web) escribe desde Gaza (traducido por ReVista del italiano):
Muchos de los residentes de la franja les rogaban a los combatientes de Hamas que se alejaran de sus casas “Váyanse de acá”, les decían “¿Quieren que los israelíes nos maten a todos? ¿Quieren que las bombas maten a los niños? Llevense las armas y los misiles de acá” les gritaban los residentes. Los miembros de Hamas no escuchaban a los civiles y les contestaban: “Traidores. Colaboradores de los israelíes. Espías de Fatah. Miedosos. Los soldados de la Guerra Santa los castigarán. Y de todos modos, todos Uds van a morir, como nosotros”.
Los combatientes de Hamas se metieron a la fuerza a las casas de los residentes y se apoderaron de los pisos altos diciéndoles a los dueños de casa: “la guerra contra el enemigo sionista nos llevará al Paraíso. ¿No quieren morir con nosotros?”. Los miembros de Hamas golpearon y balearon a todos los que trataban de interponerse en su camino para proteger a sus familias. La mayoría de los combatientes eran jóvenes de 16 y 17 años con ametralladoras. “Ellos trataban de provocar a los israelíes. Sabían que eran más débiles, pero querían que dispararan contra nuestras casas para que los culpen de crímenes de guerra.”
En todo su artículo, Boron no atribuye responsabilidad por las pérdidas de civiles palestinos a la práctica de Hamas de luchar detrás de las mujeres y de los niños, de los hospitales y de las escuelas. Esto es porque Boron no investigó, como es su responsabilidad periodística, y si lo hizo, ocultó lo que sabía. Ambas son grandes manchas para un periodista que valore su reputación.
Que los líderes de Israel hayan esperado ocho años para responder al bombardeo diario de Hamas sobre poblaciones y cultivos es sin precedentes. La única crítica que Boron le extiende a Hamas es que sus ataques son ”inadmisibles”. En realidad, y como puede leerse aquí, según la ley internacional los ataques de Hamas a Israel constituyen genocidio, además de actos terroristas y crímenes de guerra.
Según Boron y Página 12, responder a ocho años, eso es, 3000 días de bombardeos a las propias poblaciones civiles es actuar como Hitler. Apruebe o no el ataque de Israel, esta comparación, Sr. Boron, es francamente obscena y va mucho más allá de deshonesta. Trataremos sin embargo de hacer algo para educarlo a Ud. y a Página12:
Hitler mandó a la muerte a millones de personas inocentes y se apoderó por las armas de todo un continente que no había atacado a su pais. Cuando Israel entró en Gaza en 1967 la población era de 360.000, cuando salió completamente de Gaza en 2005 era de 1.4 millones. ¡Ojalá la población de judíos bajo el régimen nazi se hubiera cuadruplicado! Cuando Israel entró en Gaza en 1967, la expectativa de vida de las mujeres de Gaza era de 43 años, cuando dejó Gaza en 2005, era de 73 años. ¿Tenemos que mencionar la expectativa de vida de los judíos bajo el régimen nazi? La segunda guerra mundial en Europa se extendió desde el 1 de Setiembre de 1939 al 8 de mayo de 1945, ó 68 meses en total. O sea, que 90.000 judíos por mes fueron exterminados. En Gaza murieron alrededor de 1000 personas, la mayoría combatientes armados dedicados a la destrucción de Israel, que usaron civiles como escudos humanos, incluyendo niños, y mezquitas, escuelas y hospitales como refugios y depósitos de armas. Las Fuerzas de Defensa de Israel no usaron su poderío militar mayor en Gaza, no dejaron su código de ética de costado, no echaron a la ONU o la Cruz Roja de Gaza, no pararon los transportes de comida y medicamentos, no previnieron que los medios de difusión reportaran.
Los efectos de vivir al lado de la Franja de Gaza se puede ver en este film conmovedor que hizo a hurtadillas una muchacha israelí de 18 años en julio de 2008 y lo mostró a sus padres cuando comenzó el ataque del 27 de diciembre pasado (en inglés, buscar blog del 12 de enero). No escuchamos nada de Boron durante todos estos años cuando podría haber reclamado a Hamas que el lanzamiento indiscriminado de proyectiles sobre poblaciones civiles constituye terrorismo y crímenes de guerra.
Boron en Página12 levanta su dedo acusatorio hacia Israel y se ubica como portador de grandes virtudes e ideales humanísticos. Ninguna de sus afirmaciones contienen verdad alguna. En realidad, Boron yPágina12 en forma irresponsable, justifican el terror y la desesperanza que Hamas crea entre los palestinos y el resto de Medio Oriente, ayudando así a que esta organización terroristacontinúe su tarea de destruir el futuro de la región. En qué cree Boron es evidente en este artículo, y una verdadera vejación de la tarea periodística, de lo cual Página12 es tambiénobviamentepartícipe.