La meteórica carrera de un político húngaro antisemita termina abruptamente. No aceptan judíos en ese cargo.
El político húngaro, Csanad Szegedi, estaba haciendo una carrera espectacular. Con sólo 30 años de edad, ya era una estrella en el partido ultraderechista Jobbik, y tenía un cargo como miembro del Parlamento de la Unión Europea (MPE).
De repente, las redes sociales en la web empezaron a arder con la noticia de que Szegedi es judío. Szegedi fue forzado a renunciar al partido Jobbik pero pidió permanecer como MPE. Szegedi está siendo presionado a renunciar a ese cargo también, según el diario The Independent.
Con su carrera basada simplemente en su antisemitismo, descubrir que es judío no podia causar otra cosa que una caída abrupta. Según reporta el diario de Radio Cataratas “Después de semanas de rumores en Internet, Szegedi reconoció que sus abuelos maternos eran judíos. Su abuela era un sobreviviente de Auschwitz y su abuelo un veterano de los campos de trabajos forzados.”
Según Radio Cataratas, Szegedi ya tenía conocimiento de que era técnicamente judío desde hacía mucho tiempo. “Al parecer, en 2010, el diputado trató de detener las noticias publicadas acerca de su origen ofreciendo dinero, hecho que el MEP negó categóricamente,” escribe la publicación.
El vicepresidente del partido Jobbik calificó la oferta de soborno como una “espiral de mentiras” y exigió la renuncia de Szegedi. Sin embargo, el Wall Street Journal cita un memo interno del partido (publicado por el periódico húngaro Nepszabadsag) en donde se revela que las raíces de Szegedi son el verdadero problema: “Si no hubiera mentido sobre sus orígenes, entonces ya sea que esto es un acto bueno o no [refiriéndose a la oferta de soborno], Szegedi nunca hubiera sido elegido como MEP.”
El partido Jobbik tiene actualmente 45 miembros en el parlamento húngaro de 386 miembros y se califica de ultra-derecha nacionalista.
Según el Wall Street Journal, ya el pasado junio Szegedi admitió en una entrevista que sus abuelos son judíos ortodoxos. Szegedi dijo que se enteró de los orígenes judíos de sus abuelos recién en diciembre de 2011. Ahora, el mismo Szegedi se reunió con el rabino máximo de Hungría.
Tras decirle en esa reunión al rabino Slomo Koves que visitaría Auschwitz, donde su abuela fuera cautiva de los Nazis, Szegedi le dijo: “Pido perdón por todos los comentarios que he hecho que han ofendido a la comunidad judía,” según el diario húngaro Nepszabadsag.
The Independent publica que Szegedi comenzó su carrera como miembro fundador de la Guardia Húngara. El grupo se formó en 2007 y usó uniformes negros y banderas similares a las que usara la Cruz Flechada, el partido pro-Nazi que gobernó Hungría al final de la Segunda Guerra Mundial y mató miles de judíos. En el Holocausto murieron 550.000 judíos húngaros, la mayoría en Auschwitz y otros campos de concentración.
Szegedi ha negado haber hecho comentarios antisemitas pero los hechos demuestran lo contrario.
En noviembre 2010, en una entrevista en la televisión húngara, Szegedi declaró que la privatización masiva de valores después del fin del comunismo, era culpa de “gente en las elites húngaras que se escudan en su judaísmo.”
En otro programa de televisión en 2010, Szegedi dijo que “el problema que la derecha radical tiene con los judíos es que actores, artistas e intelectuales judíos han desecrado símbolos nacionales como la “corona de San Esteban, el primer rey cristiano de Hungría.” También se quejó de la compra de propiedades en Hungría, que según él, son para israelíes.
Szegedi que fue criado presbiteriano dice estar interesado ahora en sus orígenes judíos. Su abuela materna “sobrevivió Auschwitz y Dachau y es la única sobreviviente del Holocausto de toda su extensa familia,” declaró Szegedi en una entrevista televisada.
Szegedi puede seguir considerándose sólo húngaro, como ha declarado repetidamente durante su carrera, o puede interesarse también en sus orígenes judíos, como ha indicado recientemente. Pero no podrá continuar su carrera antisemita. Sus ex-colegas del partido Jobbik no se lo permitirán y se burlarán de él en las redes sociales.
“No lo podía creer,” dijo el rabino Koves después de recibir el pedido de Szegedi de una reunión. Pero, explicó que como rabino, tenía que “recibir a todo aquel que me pide consejo o ayuda.” Los padres del propio rabino descubrieron que eran judíos cuando ya estaban en edad adolescente. Ser judío ha sido un tema taboo en Hungría para muchos.
Hungría y España son los dos países con el índice más alto de antisemitismo en Europa, según las últimas encuestas. En Hungría el índice se ha incrementado en los últimos años a un 63% mientras que en España se encuentra en un 53%.