La Franja de Gaza limita con dos países. Ambos países restringen el paso de bienes y personas dentro y fuera de la Franja. Pero al describir el efecto de las restricciones de estas fronteras, algunas personas, entre ellas periodistas, que deberían estar mejor informados, le atribuyen la responsabilidad a uno solo de los países de forma inexacta e injusta. Según algunas organizaciones de medios de comunicación importantes, hay un estado de sitio Israelí o un bloqueo Israelí y los habitantes de Gaza están acorralados por Israel.
La Franja de Gaza limita con Israel (al norte y al este) y con Egipto (al sur). Es razonable referirse a las restricciones israelíes cuando se habla específicamente de los cruces entre Israel y Gaza (Karni, Sufa, Kerem Shalom, Erez Nachal Oz), para mencionar las restricciones israelíes. Exceptuando los casos humanitarios, en la mayoría de las ocasiones Israel ha cerrado su frontera con Gaza para el tráfico humano después de ataques perpetrados desde este territorio (que incluyen ataques dirigidos hacia los cruces) y después de que una organización que ha prometido destruir a Israel tomó el control de Gaza. Pero, con base en los hechos, la descripción de que la totalidad de las restricciones se deben a los israelíeses errónea si se toma en cuenta que un componente esencial es el cierre por parte de Egipto del cruce fronterizo de Rafah, que se sitúa entre Egipto y Gaza.
Actualmente, el cruce fronterizo de Rafah está bajo el control palestino y egipcio, tanto de jure como de facto. Los acuerdos internacionales adoptados en 2005 nombran explícitamente a estas partes como los operadores del cruce; y aunque los disturbios en la Franja de Gaza han perturbado la implementación de los acuerdos, la ocasional apertura bilateral del cruce realizada por Egipto y Hamas demuestra que, a pesar de todo, estos poderes ejercen el control de este paso de la Franja de Gaza en ambos sentidos.
Antecedentes históricos:
La presencia israelí a lo largo de la frontera entre Egipto y la Franja de Gaza, conocida también como el corredor Philadelphi, terminó en el verano de 2005, cuando Israel retiró de Gaza a todos sus soldados y ciudadanos, como parte de su Plan de Retirada.
Inicialmente, Israel consideró mantener tropas a lo largo del corredor Philadelphi. El Brig. Gen. Michael Herzog indica que la institución de defensa del país presentó argumentos contra la evacuación de esta zona porque existía una preocupación sobre la militarización de Gaza. Herzog explicó en un escrito elaborado para el Instituto de Washington para la Política en el Cercano Oriente que Sin soldados israelíes que protejan la frontera, se temía que una mayor cantidad de armamentos y sistemas de armamentos nuevos, que incluyen misiles antiaéreos y cohetes mejorados, podrían intensificar el peligro para Israel. Se debatió que Ninguna otra de las partes puede sustituir eficazmente la motivación y la capacidad de Israel para frenar el contrabando.
Pero a pesar de las preocupaciones sobre su seguridad, Israel decidió abandonar esta zona fronteriza para terminar con su presencia en la Franja de Gaza de forma completa e inequívoca.
Con la esperanza de llenar el vacío que se crearía con la retirada israelí, y con el objetivo de combatir el contrabando de armas y otros bienes hacia Gaza a través del corredor Philadelphi, Israel y Egipto firmaron un documento el 1º de septiembre de 2005 (los Acuerdos sobre el Despliegue de una Fuerza Designada de Soldados de Frontera por toda la Frontera en el Área de Rafah) que permitía a los egipcios desplegar 750 soldados de frontera en el área. Anteriormente, bajo los términos de los acuerdos de paz de 1979 entre Egipto e Israel, Egipto sólo podía desplegar policías. (Para más detalles ver aquí. Para revisar análisis diferentes de los Acuerdos ver aquí y aquí). Mientras tanto, el cruce fronterizo de Rafah estaba cerrado temporalmente para su renovación.
Un mes después, se siguió este acuerdo con dos acuerdos multilaterales que se centraron en el movimiento y el comercio palestino. El Acuerdo sobre Movimiento y Acceso (AMA) establece la apertura y actualización de los pasos fronterizos entre la Franja de Gaza y sus dos vecinos, las exportaciones de los productos de Gaza, el movimiento de personas y bienes entre Gaza y Cisjordania, que incluyen acuerdos para atender las preocupaciones de seguridad israelíes, la reducción de obstáculos en Cisjordania en la medida de lo posible sin dañar la seguridad israelí, el avance en la construcción de un puerto marítimo en Gaza y la deliberación sobre el aeropuerto de Gaza.
Los Principios del Acuerdo del Cruce de Rafah (PACR) amplían las estipulaciones generales del AMA y agrega detalles específicos sobre la reapertura del cruce de Rafah entre Egipto y Gaza. Estos Principios estipulan que La Autoridad Palestina operará Rafah en su lado y Egipto en el suyo, Y que observadores de la Unión Europea estarán en el lugar para monitorear la implementación del acuerdo y prestar ayuda a los palestinos.
Aunque los PACR le permiten a Israel elevar sus preocupaciones sobre quién pasa a través del cruce y trabaja allí, la decisión final sobre estos asuntos se dejó en manos palestinas. Esto implicó que el límite ya no estaba bajo el control de Israel. Según las palabras de la secretaria de Estado de EE. UU., Condoleezza Rice en una conferencia de prensa realizada el 15 de noviembre de 2005 que marcó la finalización del acuerdo, por primera vez desde 1967, los palestinos controlarán la entrada y salida desde su territorio… El cruce fronterizo de Rafah es un cruce internacional, con los palestinos de un lado, los egipcios del otro y con la ayuda de terceros. Javier Solana, un alto delegado de EE. UU. añadió: Esta es la primera vez que se abre una frontera y no está controlada por los israelíes. El funcionario palestino Saeb Erekat afirmó igualmente que esta es la primera vez en la historia en que nosotros mismos manejaremos un paso internacional, y es la primera vez que Israel no tiene un veto sobre nuestra posibilidad de hacerlo.
Disturbios
El Acuerdo sobre Movimiento y Acceso y los Principios del Acuerdo del Cruce de Rafah fueron productos de un período breve de optimismo relativo. Israel acababa de retirarse de la Franja de Gaza y partes de Cisjordania. Los palestinos estaban celebrando. Había conversaciones de retiradas adicionales, desarrollo económico en Gaza y los grupos palestinos violentos finalmente estaban bajo el control del presidente palestino Mahmoud Abbas. Los israelíes, al menos aquellos suficientemente afortunados de vivir fuera del rango de los cohetes que se lanzaban incesantemente desde Gaza hacia Israel, se sintieron más seguros en comparación con los años del terror palestino.
Pero el optimismo y los acuerdos se desmoronaron pronto, a medida que tres disturbios transformaron la Franja de Gaza. Primero, Hamas, el grupo extremista que Israel y el Occidente clasifican como una organización terrorista, derrotó al partido Fatah de Abbas en las elecciones parlamentarias palestinas de enero de 2006, y pasó a formar un gobierno que fue rechazado por la comunidad internacional. Sin embargo, a pesar de las ondas de choque que causó la sorpresiva victoria de Hamas, el cruce fronterizo de Rafah permaneció abierto virtualmente todos los días entre el 25 de noviembre de 2005 y el 25 de junio de 2006. Esto fue posible en parte porque la Guardia Presidencial de Abbas tomó el control del cruce en abril de 2006, unos días después de que el nuevo gobierno se juramentó. Con el cruce fronterizo administrado por una milicia que no estaba afiliada con Hamas, los observadores europeos, conocidos como la Misión de Ayuda Fronteriza de la Unión Europea (EUBAM, por sus siglas en inglés) en Rafah, pudieron continuar trabajando sin violar la prohibición de la UE de lidiar con Hamas.
El segundo evento decisivo tuvo un impacto más inmediato, y condujo a un período de un año en el que la terminal de Rafah se abrió sólo esporádicamente. El 25 de junio de 2006, los pistoleros de Hamas se infiltraron en Israel desde la Franja de Gaza, mataron a dos soldados israelíes y secuestraron a un tercero. Israel respondió con el cierre de su frontera con Gaza y el lanzamiento de una operación militar, conocida como la Operación Lluvias de Verano, con la intención liberar al soldado Gilad Shalit.
El cierre del cruce fronterizo Kerem Shalom hacia Gaza, implicó que los supervisores de EUBAM, con base en la cercana ciudad israelí de Ashkelon, que pasan a través de Kerem Shalom en su ruta hacia Rafah, no pudieran trabajar. Y debido a que los PACR estipula que la terminal de Rafah no puede funcionar sin EUBAM, la terminal se cerró. (Según EUBAM, el grupo tiene su base en Israel porque la situación de seguridad le impide moverse hacia su base prevista dentro de Gaza).
Aunque hubieran podido pasar a través de Kerem Shalom, es dudoso que los observadores de EUBAM hubieran abierto el cruce fronterizo durante el combate en Gaza. No obstante, se hizo patente que la dependencia de este grupo del cruce de Kerem Shalom le ha permitido a Israel ejercer algún control indirecto sobre la frontera de Gaza con Egipto, aunque sea desde lejos. Esto cambiará eventualmente.
Pero aún entonces, el control era limitado. Por ejemplo, el 14 de julio de 2006, al continuar el combate, los militantes de Hamas abrieron con una explosión la frontera de Rafa y cientos de palestinos cruzaron desde Egipto hacia Gaza. Al haber abandonado el corredor de Philadelphi, Israel fue incapaz de detener la violación.
Aunque al avanzar el año 2007 se hizo evidente que la batalla por el control de la frontera, y la Franja de Gaza en general, no involucraría a Israel, sino más bien a los rivales palestinos que se encontraban en antagonismo creciente: Fatah y Hamas. Las escaramuzas sangrientas entre los bandos se intensificaron e impulsaron a Gaza hacia la guerra civil. La disputa se dirimió en junio, cuando en pocos días de lucha intensa, las fuerzas de Hamas aplastaron violentamente las tropas leales a Abbas y tomaron el control absoluto de la Franja.
Este tercer disturbio marcó el final del viejo paradigma en la frontera de Rafah. Desde el secuestro de Gilad Shalit en junio de 2006 hasta que Hamas tomó el poder de Gaza en junio de 2007, la terminal de Rafah todavía podía operar en los 83 días que los observadores de EUBAM lograban llegar al lugar. Pero la terminal se cerró el 9 de junio como resultado de luchas mutuamente destructivas, y el 15 de junio de 2007 EUBAM anunció una suspensión temporal de actividades. Su sitio web explica: Las actividades de EUBAM se suspendieron debido al apoderamiento de Hamas de la Franja de Gaza. La UE tenía una política que impedía el contacto con Hamas. Aunque el grupo no se disolvió total y permanentemente, parece que hay pocas esperanzas de que los supervisores de la UE regresen al cruce mientras Hamas esté al mando.
Soldados de frontera egipcios en el cruce fronterizo de Rafah
Egipto, que era parte de los acuerdos que regían las operaciones de la terminal de Rafah y estaba preocupado por su propia ambiciosa oposición islámica, la Hermandad Musulmana, asociada con Hamas, estaba reacio a permitir la reapertura de la terminal.
Aunque generalmente ha mantenido cerrado el cruce fronterizo, “extraoficialmente” Egipto abrió el cruce de Rafah sin la presencia de EUBAM, en coordinación con Hamas, el 18 de junio y el 7 de julio, para permitir que los palestinos cruzaran desde Egipto hacia Gaza.
Cualquier duda restante sobre quién quedó en control del cruce fronterizo se disipó el 3 de diciembre de 2007, cuando, para la consternación israelí, Egipto y Hamas negociaron y supervisaron el paso de 700 palestinos hacia Egipto a través de Rafah. Al día siguiente cruzaron otros 1.000 palestinos. Israel, exasperada y preocupada de que la ruptura del acuerdo internacionalPACR le permita a conocidos terroristas salir de Gaza fácilmente, entrenarse con terroristas especializados en Irán o Líbano y luego retornar a Gaza para atacar a sus ciudadanos, no pudo hacer nada más que presentar una queja a Egipto.
Y el 23 de enero de 2008, Hamas forzó la apertura de la frontera al hacer explotar un hueco en el muro que se encuentra entre Gaza y Egipto. Los soldados de frontera egipcios miraron mientras muchos miles de palestinos cruzaban la frontera. Israel no pudo hacer nada. Hamas tenía el control absoluto, escribió Ibrahim Barzak, reportero de la Prensa Asociada (AP, 23 de enero de 2008).
Al igual que sucedió con la violación anterior, esto era un recordatorio de que, en última instancia, lo que determina el control del cruce son las botas (y armas) en el terreno y no las palabras en el papel.
Desde entonces, el muro se ha reparado, pero Egipto y Hamas continúan demostrando que ellos son quienes controlan el paso entre Gaza y su vecino del sur.
Egipto abrió brevemente su lado de la frontera en diversas ocasiones en los meses subsiguientes. Algunas veces sólo permitió el regreso a Gaza de palestinos atascados en Egipto, otras veces permitió la circulación de doble vía. No obstante, estas fueron excepciones que confirman la regla: Egipto decide cuándo se abre la terminal de Rafah y cuándo se cierra. (Por su parte, Hamas prefiere que este cruce permanezca abierto siempre bajo el control exclusivo de Egipto y Hamas). Esto significa que aunque Israel controla sus propios límites con Gaza, como es el derecho de todo estado soberano, no controla todas las fronteras de Gaza.
Presentaciones de los medios de comunicación
A pesar de las realidades, algunos medios de comunicación persisten en responsabilizar solamente a Israel por las restricciones de la frontera de Gaza. Por ejemplo, Juan Miguel Muñoz, ha escrito una serie de artículos para El País desde la franja de Gaza, y la ha caracterizado como la mayor cárcel del mundo culpando a Israel de lo que ocurre en Gaza, nunca a Hamas, y nunca, ni una vez, citado a Egipto y su actuación política fronteriza respecto a Gaza.Una cosa es que un residente de Gaza citado en el escrito atribuya su sentido de aislamiento a un estado de sitio israelí; se puede esperar que los partidarios echen las culpas selectivamente. Otra cosa muy diferente es que un reportero, en lugar de aclarar que de hecho ambos países vecinos restringen estrechamente la circulación a través de sus fronteras con Gaza, haga eco de la cita sin advertir el error de omisión.