Titula EFE:
Israel agilizar la expansión de asentamientos en territorio palestino ocupado (17/11/2020)
En insiste en su primer párrafo:
Israel intenta agilizar la expansión de asentamientos en territorio palestino ocupado antes de la toma de posesión
Emplear el término territorio palestino ocupado no es informar, sino tomar partido. No le corresponde a la agencia informativa decidir si dicho territorio es palestino o no. Según las resoluciones 242 y 338 del Consejo de Seguridad de la ONU, así como los Acuerdos bilaterales firmados por israelíes y palestinos y la Hoja de Ruta, las fronteras definitivas deberán ser decididas mediante negociaciones entre las partes en conflicto. Y especifican que las líneas de armisticio previas al 67 no son fronteras.
Por lo tanto, teniendo en cuenta que existen dos partes en conflicto que deben negociar, no le corresponde a la agencia decidir qué territorios son palestinos y cuáles no. La expresión territorio palestino ocupado presupone que existen unos territorios ya definidos, con lo cual, ¿qué quedaría por negociar?
Recordemos además, que históricamente, ni Jerusalén, ni la zona fueron jamás territorio palestino. Jerusalén, desde 1948 a 1967, estuvo ocupada por Jordania. Antes, fue parte del Mandato Británico. Antes del Mandato Británico, la ciudad estuvo bajo control otomano, y así sucesivamente. A través de la historia, en ningún momento ninguna parte de la ciudad fue “territorio palestino”. El plan de partición del 29 de noviembre de 1947 decretó que Jerusalén fuera un corpus separatum, una ciudad internacional administrada por la ONU durante 10 años, en cuyo momento el estatus de la ciudad se decidiría en un referéndum. Ese referéndum nunca tuvo lugar debido a la agresión de los países árabes a las pocas horas de la independencia de Israel.
Esto es algo que han tenido en cuenta diversos medios internacionales a la hora de corregir dicha caracterización errónea de los mencionados territorios (entre ellos, The Wall Street Journal, The New York Times o Deutsche Presse-Agentur (DPA).)
Y ya que estamos hablando de medios internacionales, miremos cómo han tratado la información las tres agencias internacionales más importantes:
Reuters: Israel promotes settlement plan for sensitive East Jerusalem area (Israel promueve un plan de asentamientos en una zona sensible de Jerusalén Oriental)
Associated Press: Israel advances plans in sensitive east Jerusalem settlement (Israel adelanta planes en un asentamiento sensible de Jerusalén Oriental)
AFP: Israel Advances Plans For New Jerusalem Settler Homes (Israel avanza planes para nuevas casas de colonos en Jerusalén)
Associated Press además especifica en el cuerpo de la noticia que se trata de Palestinian-claimed parts of the city from the West Bank (Partes de la ciudad reclamadas por los palestinos en Cisjordania) y explica que The Palestinians seek the West Bank, along with the Gaza Strip and east Jerusalem areas Israel captured in the 1967 Mideast war for their future state (“Los palestinos quieren Cisjordania, junto con la Franja de Gaza y el este de Jerusalén – áreas que Israel capturó en la guerra de Oriente Medio de 1967 – para su futuro estado”).
Por otra parte, en la crónica, la agencia EFE asegura que:
En los últimos cuatro años, Trump fue mucho menos crítico con la expansión colonial israelí que las administraciones estadounidenses previas, y su Ejecutivo incluso dejó de considerar las colonias ilegales en 2019.
Pero la administración americana no los consideraba ilegales antes de Trump. De hecho, desde el final de la administración Carter, USA ha evitado sistemáticamente designar los asentamientos como ilegales. En 1981, el presidente Reagan, incluso criticando los asentamientos, dijo explícitamente que “no son ilegales”. Esta posición no fue revocada por las administraciones posteriores.
Respecto a Obama, la posición es que eran ilegítimos.
Teniendo en cuenta las administraciones de Obama, Bush, Clinton, Bush y Reagan, es incorrecto afirmar que Trump dejó de considerar las colonias ilegales en 2018. Associated Press, por ejemplo, corrigió en su día este mismo error.
Y otro aspecto problemático del texto de EFE, es que tan sólo aporta voces partidistas: las ONG Ir Amim y Paz Ahora, así como Nir Hasson, del diario progresista Haaretz. También críticas de actores políticos como la Union Europea o la ONU.
Nadie para explicar la versión israelí.
Desde CAMERA en Español, (ReVistamo.org) hemos advertido a EFE de los errores arriba mencionados, y esperamos poder ver alguna corrección, así como un periodismo más profesional en próximas ocasiones.