Para el grupo Vocento los israelíes sólo son colonos, religiosos o militares

“Netanyahu endurece la represión”, artículo del periodista Mikel Ayestarán para el grupo Vocento (ABC, El Correo, etc…) del 06 de Octubre de 2015.

El texto sitúa, sin explicarlo, el origen de la situación actual en “la inestabilidad por los problemas en la Explanada de las Mezquitas”. Suficientemente vago como para que el lector no entienda del todo y se deje guíar por una falsa rumorología que apuntaría a que Israel habría cambiado el estatus quo de los lugares sagrados.

¿Y los asesinatos de 4 civiles israelíes en tan sólo 48 horas?

Como es un detalle demasiado relevante como para ser pasado por alto, el artículo sí incluye mención a las víctimas que son definidas como colonos, rabino y “un reservista del ejército”.

Un reservista del ejército: como todos los israelíes, ya que el servicio militar es obligatorio. Pero este “reservista” no iba vestido de militar, sino que era un civil más que se dirigía al kotel a rezar, llevando de la mano a su hijo de dos años, también herido en el ataque.

¿Y los colonos? Dos padres de familia acribillados en su coche delante de sus cuatro hijos menores de edad.

No sólo se evitan los detalles de estos macabros asesinatos, sino que se intenta desdibujar a las víctimas de manera a evitar cualquier asomo de empatía.

Por el contrario, las víctimas palestinas son jóvenes de “18 y 13 años”, y:

“si el caído ha sido abatido por la fuerzas de Israel tras cometer un ataque su familia pagará además con la demolición de la casa, momento que también generará escenas de gran tensión”

Es decir, si el palestino ha matado a alguien es un problema menor, el problema es que Israel demolerá su casa y eso será la causa de que haya más violencia.

Por otra parte, no deja de sorprender el empleo de Tel Aviv como centro de toma de decisiones de Israel. Asegura Ayestarán que “Tel Aviv adopta medidas sin precedentes”.

Pero el periodista sabe perfectamente que Tel Aviv no ha adoptado ninguna decisión, ya que la decisión se ha tomado en la reunión de ministros que tiene lugar en Jerusalén. Porque por mucho que los periodistas no les guste que Israel haya nombrado a Jerusalén su capital, no tienen el derecho de inventar una realidad paralela. Ni Tel Aviv ni Haifa ni Kiryat Shmona toman decisiones más allá de sus municipios. Las decisiones de gobierno se toman en Jerusalén, porque ahí están todos los organismos oficiales.