Pero los medios están olvidando mencionar un hecho sumamente llamativo que tuvo lugar no hace tanto.
En enero de 2013, el diario Algemeiner publicaba lo siguiente:
“El presidente de la Autoridad Palestina (AP), Mahmoud Abbas, ha dicho que ha rechazado el acuerdo negociado por las Naciones Unidas con Israel para permitir que los refugiados palestinos que viven en Siria se reasienten en Cisjordania y Gaza”.
Ante un grupo de periodistas en El Cairo, Abbas dijo que en diciembre, él había se había comunicado con Ban Ki-Moon, Secretario General de la ONU, para que contactara con Israel en su nombre, para resolver el estatus de los palestinos atrapados en la guerra civil siria.
Sin embargo, indicaba el medio, Abbas dijo que Israel acordó condicionalmente, en tanto y en cuanto los “refugiados” palestinos renunciaran a los reclamos de “retorno” a Israel; algo que Abbas rechazó:
“‘Así, rechazamos eso y dijimos que es mejor que mueran en Siria a que renuncien a su derecho de retorno‘, dijo Abbas a los periodistas egipcios, según informó Associated Press”.
Primero el cálculo político, luego las vidas.
¿Qué dirá hoy Abbas?