El 22 de octubre de 2014, un ataque terrorista en Jerusalen causaba la muerte de un bebé de tres meses y heridas a otrasocho personas. EFE publicaba una nota al respecto bajo el titular:
Un bebé muerto al embestir un vehículo a viandantes en Jerusalén
Si lo mínimo que se le pide a una nota informativa es que se especifique quiénes son los protagonistas, en la crónica de EFE en ningún momento se menciona el hecho de que el bebé es israelí ni de que el causante del ataque es palestino.
Pero sin duda lo más sorprendente es la última frase, que parece querer desvictimizar a la víctima, contextualizando el atentado de manera más que dudosa:
Medios palestinos denunciaron esta semana un incidente similar, en el que una niña de corta edad palestina murió tras ser atropellada por un colono en la Cisjordania ocupada.
El incidente en cuestión, sin embargo, no tiene nada que ver con lo sucedido. El atropello al que hace mención la agencia EFE fue un accidente y no un atentado.